3.1. El coleccionismo privado

Galeria  de los Ufizzi
Museo Thissen Bornemizsa

Galería de los Uffizzi (Florencia)
Fotografía de Agu en Flickrs bajo CC

Museo Thyssen Bornemizsa (Madrid)
Fotografía de Swiv en Flickr bajo CC


 

Al contrario de la vocación pública de las grandes empresas de mecenazgo y patrocinio, hay una larga tradición histórica de coleccionismo privado llevada a cabo por los llamados -antiguamente y desde el Renacimiento- "mecenas" (La famosa Galería de los Uffizi en Florencia proviene de la colección de los todopoderosos Medici, los mismos que "financiaron" la Capilla Sixtina) y que hoy tienen tal vez el menos romántico nombre de "magnates" como dueños de grandes emporios comerciales. Las casas reales y grandes familias nobiliarias o empresariales han hecho muchas veces alardes de su poder económico adquiriendo grandes cantidades de obras de arte solo por el afán privado de poseerlas para disfrute propio. Muchas de estas grandes obras de arte salen a subasta en importantes casas como Sothebys y Christie's. Algunas obras alcanzan en estas mediáticas subastas cifras astronómicas (especialmente, cuando se tratan de obras de Picasso o Van Gogh) lejos del alcance del común de los mortales, que suelen acabar (aunque casi siempre se mantiene el anonimato de sus compradores) en las lujosas mansiones de ciertos grandes empresarios, como el reciente caso del magnate del petróleo, el ruso Román Abramovic.

En algunos casos, estas grandes casas o particulares terminan donando sus fondos al estado o a los grandes museos nacionales, con lo que dichas obras pueden ser asequibles al público, ya que antes estas obras solo pertenecían a un ámbito privado. En España tenemos el caso del Museo Thyssen-Bornemisza, fruto de una donación temporal de sus fondos al estado por su heredera, Tita Cervera.

A nivel más modesto, muchos artistas, galeristas y particulares son también pequeños pero importantes coleccionistas de arte contemporáneo. Pero recuerda: internet es el mayor museo del mundo...