1.2.3. La mancha

A Lion Lying Down.Rembrandt

A Lion Lying Down.Rembrandt. Imagen de dominio público vía Wikimedia Commons

Generalmente se piensa que la esencia del dibujo es la línea, siendo esta la forma más pura de dibujo, de todos modos un dibujo no deja de ser considerado como tal aunque se incluyan elementos considerados pictóricos como es la mancha, ya sea seca o a la aguada con sus múltiples variantes.

Igualmente otras técnicas de trabajo en color como la acuarela o el pastel también son consideradas como obras dibujísticas, por su soporte, que es el papel, y por su expresión rápida e inmediata.

Además del claroscuro, con la mancha podemos crear sensación de volumen pero también nos permite estructurar superficies o encajar una composición. Su mayor ventaja es la rapidez en la ejecución de la obra y la expresividad fácil e inmediata pero al tratarse de un elemento más gestual que la línea proporciona menor exactitud a la hora de encajar, de valorar el claroscuro y de crear un efecto volumétrico en las formas a la vez que requiere un mayor dominio de la técnica.

retrato resuelto mediante mancha
retrato resuelto mediante mancha
Imagen de magvil con licencia CC vía Flickr
Imagen de magvil con licencia CC vía Flickr

La mancha no tiene que estar vinculada a la línea y puede emplearse desligada a la estructura lineal previa del dibujo, como un elemento con autonomía propia, gracias a su gran fuerza expresiva.





imagen de falling sky con licencia CC vía Flickr imagen de falling sky con licencia CC vía Flickr
imagen de falling sky con licencia CC vía Flickr imagen de falling sky con licencia CC vía Flickr

 

Icono de iDevice Reflexión

Interpreta mediante la mancha los volúmenes de la fotografía de la actividad de autoevaluación del apartado anterior.

A partir del estudio de los valores tonales que has realizado en la misma, coloca sobre ella un nuevo papel vegetal y calca en él tan sólo las líneas que delimiten los valores bajos de la imagen, parcelando cada una de ellas.

Ve cubriendo mediante manchas planas de tinta a la aguada (es conveniente que vuelvas a ver el vídeo sobre esta técnica que se incluye en el tema 2), de la siguiente forma:

  1. En primer lugar cubre toda la superficie señalada y que debe abarcar los tres valores tonales más bajos. Deja secar.
  2. Después colorea sólo los dos tonos más oscuros, superponiendo esta capa a la anterior. Vuelve a dejar secar.
  3. Por último, cubre solamente las zonas del tono más oscuro.

Habrás comprobado que al superponerse las tres manchas han ido aumentando en intensidad y por lo tanto en oscuridad aquellas zonas que has cubierto con mayor número de capas. Estos tres valores tonales son suficientes para definir el volumen del modelo mediante la mancha.

No olvides que dibujar es divertido, si no obtienes el resultado esperado recuerda que a dibujar se aprende dibujando, cuanto más practiques mejor dominarás esta técnica. ¡Ánimo y suerte!