2.4. El laocoonte. ¿Qué fué primero?

"Primero se rodea los cuerpos de sus dos hijos mancebos y atenazan a dentelladas sus miserables miembros; luego arrebatan al padre que armado con un dardo acudía en su auxilio, y le amarran con grandes ligaduras, y aunque ceñidas ya con dos vueltas sus escamosas espaldas a la mitad de su cuerpo y con otras dos a su cuello, todavía sobresalen por encima de sus cabezas y sus erguidas cervices. Él pugna por desatar con ambas manos aquellos nudos, chorreando sangre y negro veneno las venas de su frente, y eleva a los astros al mismo tiempo horrendos clamores, semejantes al mugido del toro cuando,herido, huye del ara y sacude la segur asestada con golpe no certero..., y todos dicen que Laoconte ha merecido su desastre por haber ultrajado la sacra imagen de madera, lanzando contra ella su impía lanza"*.
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Versión libre del Eugenio Ochoa del Libro "Otro Laoconte. Reflexiones sobre los límites de las Artes Plásticas. Esquema de una sociología del arte y el mundo pictórico de dos novelistas" de Enric Jardí. Ed Aguilar. Madrid, 1968.

Así es como Virgilio cuenta la muerte de Laoconte, aquel sacerdote que advirtió a los troyanos del peligro que conllevaba el admitir en la ciudad el famoso caballo de madera que fue la perdición de Troya. Los dioses que por supuesto estaban del lado de los griegos hicieron salir del mar dos serpientes que acabaron con su vida y las de sus hijos.

Este episodio de la mitología ha sido el motivo de muchas representaciones plásticas (una de las más famosas es la pintada por El Greco en la que los dos muchachos se retuercen queriendo librarse de las serpientes con una ciudad de fondo que no es Troya, sino Toledo). De entre ellas hay que tener en cuenta especialmente la del grupo escultórico aparecido en unas excavaciones en Roma realizadas, en 1506; que hoy puede admirarse en el museo Vaticano.

 Grupo escultórico Laocoonte y sus hijos.
Museo vaticano.
Lic. CC. En Wikimedia. Dominio público

Los eruditos vieron en él la obra, que según Plinio, guardaba en su palacio el emperador Tito.

Esta obra no es propiamente griega sino que se realizó seguramente en Rodas, una civilización helenística en la que los escultores ( Agesandro, Polidoro y Atenodoro de Rodas) de la época (s. III a.C.) parecían gustar de cierto virtuosismo.

Gothold Ephraïn Lessing, filósofo alemán; publicó en Berlín en 1776 con el título "Laoconte" y el subtítulo: "Sobre los límites de la pintura y la poesía", en el que se plantea si Virgilio compuso el fragmento anteriormente narrado, después de ver el grupo escultórico y basándose en él para hacer la descripción de la muerte del sacerdote y sus hijos; o si quizá fue al revés, que los escultores usaran la descripción virgiliana para realizar tan maravillosa escultura.

El grupo de Laocoonte es un ejemplo de como las artes se mezclan. En este caso se mezclan literatura y escultura. Es un ejemplo poco específico, pero muy hermoso. A lo largo de esta Unidad 1 de la asignatura Volumen ya hemos visto otros ejemplos, aunque no le hayamos prestado demasiada atención a este factor.